Si arrancamos el pelo, provocamos un estímulo sanguíneo de forma continuada en la zona, que hará que nuestro tratamiento sea menos efectivo e incluso nulo.
Existe una creencia muy generalizada, que si nos arrancamos el pelo, llegará un momento que desaparecerá, pero esto es una leyenda urbana y nada más lejos de la realidad.
Si bien, sí es cierto que algunas zonas como es el caso de las piernas por ejemplo, hay folículos que se desactivan si arrancamos el pelo año tras año, porque no es una zona hormono-dependiente. Pero no pasa lo mismo en la cara, escote, areolas o línea alba debido a la actividad hormonal y la densidad folicular de dichas zonas. Por tanto, ante un estímulo interno (hormonal) o externo (arrancar) estos nos saldrán cada vez más y más fuertes.
¿Qué debemos hacer?
Cuando nos sometemos a una Electrodepilación podemos RASURAR, RECORTAR o DECOLORAR el pelo, ya que estos métodos no alteran su crecimiento y así no estaríamos generando ningún tipo de estímulo.